A la nueva dirección del Festival Internacional de Cine de Gijón aún
le queda mucho camino por recorrer hasta que se levante el telón, el
próximo 16 de noviembre, de la gala de inauguración de la 50.ª edición
del certamen. Un camino lleno de pequeñas paradas que sirven como
aperitivo a la espera del menú degustación que quiere ofrecer Nacho
Carballo a los cinéfilos. Este mismo sábado, cine y música clásica se
dan la mano sobre el escenario del teatro Jovellanos en una singular
propuesta en la que el gijonés Mariano Rivas dirige a la Orquesta
Sinfónica de Georgia acompañando la proyección de «Luces de la ciudad»
de Chaplin. Y el lunes, como colofón a la Semana de Europa, se proyecta
en el centro municipal «Gijón Sur» la cinta francesa «Las nieves del
Kilimanjaro», película ganadora del Premio Lux 2011 del Parlamento
europeo.
De otros avances en la organización del certamen se
encargaba ayer de informar el director del Festival al consejo de
administración del teatro Jovellanos. Los más llamativos tienen que ver
con el diseñador catalán Javier Mariscal y el cineasta serbio Emir
Kusturica. El primero se hará cargo del diseño del logo y el cartel de
la edición y el segundo dará un concierto el 7 de agosto con su banda
«The No Smoking Orchestra» para festejar estas bodas de oro.
Nacho
Carballo defendía ayer, antes del consejo, la elección de Mariscal ante
las voces críticas de quienes reivindican una apuesta por los creadores
asturianos. «Estamos hablando del Festival Internacional de Cine de
Gijón no del festival asturiano de cine de Gijón. Tiene que haber una
proyección internacional y nadie más internacional que Mariscal. Y
estamos hablando del cincuentenario del festival y de un cartel que
quedará para la historia. Tal vez si fuera la edición 49 o la 51
Mariscal no haría el cartel», explicaba Carballo, que también defendió
la relación del catalán con el cine de animación, que se busca potenciar
en el encuentro gijonés incluyéndolo en la sección competitiva. Javier
Mariscal y Fernando Trueba son los responsables de «Chico y Rita», la
cinta de animación que llevó a España a la última gala de los «Oscar».
Carballo, eso sí, prefirió no concretar fuera del ámbito del consejo de
administración los euros de la operación. «Un precio maravilloso para lo
que es Gijón», sentenció. El diseñador estará en la ciudad en octubre
para mostrar su cartel. Una semanas antes se quiere presentar el logo.
«Queremos
trabajar con los mejores, sean asturianos o no», explicó Carballo, para
quien esta nueva polémica -una más tras la decisión del concejal Carlos
Rubiera de nombrar director al joven asturiano en detrimento de José
Luis Cienfuegos- «no es más que esa intención de buscarle tres pies al
gato en todo lo que haga el Festival de Cine. Tengo un festival que
hacer, muchas cosas por delante y poco tiempo, así que no me quiero
parar en este tipo de cosas».
Cosas como la existencia de un gran
frente contra el FICXixon por este cambio en su equipo director. «No
hay boicot al Festival de Cine de Gijón. No me estoy encontrando con más
dificultades que cualquier otro evento cultural que necesita dinero
público en este tiempo de recortes o con problemas de fechas de los
directores, que entiendo que también tendría el equipo anterior»,
explicaba Carballo, que sigue pendiente de la convocatoria pública del
Ministerio de Cultura para saber la ayuda que puede sumar de la
Administración central.
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